AGF de Penta al borde de números rojos y reconocen impacto reputacional de matriz

El riesgo reputacional del que tanto se habló a raíz del caso Penta para sus filiales, hoy es un impacto real.
La formalización con arresto domiciliario por acusaciones de delitos tributarios contra sus controladores, Carlos Alberto Délano y Carlos Eugenio Lavín, le está pasando la cuenta a una de sus empresas.

Penta Administradora General de Fondos (AGF) envió sus resultados ayer a la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS), donde revela que durante el primer semestre de este año obtuvo una utilidad neta después de impuestos de $ 3,6 millones, cifra inferior en un 99,25% a los $ 491,8 millones que registraron durante el mismo período del año anterior.

Los ingresos netos por actividades ordinarias ascendieron a $ 1.508 millones, inferior en 11,13% a los
$1.696 millones logrados en el mismo período del año anterior.

"Esta situación se explica por la contracción general de la economía y, por ende, del mercado que viene dándose desde el segundo semestre de 2014; y por los efectos no directamente cuantificados producto del riesgo reputacional que ha afectado a su matriz",dice su análisis razonado.

Si se miran los índices de rentabilidad de la compañía, se aprecia que tanto la rentabilidad del patrimonio, al igual que la utilidad por acción llegan a cero. El rendimiento de activos operacionales es 0%.

Penta AGF tiene 11 años en el mercado y maneja 12 fondos mutuos, 12 fondos de inversión pública y dos fondos de inversión privados.

Recientemente, el Grupo Security llegó a un acuerdo con Banco Penta para comprar sus filiales de administración de activos Penta Administradora General de Fondos y Penta Corredores de Bolsa, a un precio máximo de $ 19.500 millones, equivalente a un patrimonio líquido ajustado de las compañías por $ 15.000 millones y un mayor valor de $ 4.500 millones. El cierre de la operación está a la espera de la aprobación regulatoria.

Remuneraciones a "personal clave"

Si bien los resultados al primer semestre de la firma fueron $ 3,6 millones, las remuneraciones a ejecutivos considerados "personal clave" alcanzaron los $ 218,8 millones, lo que significó un alza de $ 27,4 millones respecto al primer semestre de 2014. La firma detalla que el "personal clave" está compuesto por el gerente general y otros dos ejecutivos.